Situado en la zona rústica de Llucmaor, la vivienda se organiza a partir de un espacio diáfano.

 

El salón - comedor se encuentra ubicado en el punto central de la planta, distribuyendo los demás espacios a su alrededor.

 

Las zonas húmedas se sitúan en la fachada norte, creando así una amortiguación térmica de los espacios de descanso.

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Su gran cubierta inclinada, de una única pendiente y con más de 8 metros de anchura, permite disponer de aperturas en la parte alta de la fachada sur, potenciando el efecto térmico de la convección, refrescando de manera natural la vivienda.

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La piscina desbordante junto al porche y la pérgola crean un ambiente íntimo y protegido, permitiendo disfrutar de las puestas de sol de este entorno privilegiado.

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Respecto a la fachada, se integra en su entorno rural combinando fragmentos de piedra con elementos revestidos, todo ello rematado con piedra de Santanyí.

 

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